"Aún después de que la luciérnaga hubiera desaparecido, el rastro de su luz permaneció largo tiempo en mi interior. Aquella pequeña llama, semejante a un alma que hubiese perdido su destino, siguió errando eternamente en la oscuridad de mis ojos cerrados. Alargué la mano repetidas veces hacia esa oscuridad. Pero no pude tocarla. La tenue luz quedaba más allá de las yemas de mis dedos."
"-¿Por qué estás ausente?
-Quizá porque aún me cuesta volver a la vida cotidiana -concedí tras pensar unos instantes-. Me da la impresión de que este no es el mundo real. La gente, las escenas que me rodean no me parecen reales."
Tokio blues (Norwegian wood)
- Haruki Murakami -
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