He
visto más de cien hombres venir por los caminos a trabajar en los ranchos, con
sus hatillos de ropa al hombro, y esa misma idea en la cabeza. Cientos de
ellos. Llegan y trabajan y se van; y cada uno de ellos tiene un terrenito en la
cabeza. Y ni uno solo de esos condenados lo ha logrado jamás. Es como el cielo.
Todos quieren su terrenito. He leído muchos libros aquí. Nadie llega al cielo y
nadie consigue su tierra. La tienen en su cabeza, nada más. No hacen más que
hablar de eso, siempre, siempre, pero sólo lo tienen en la cabeza.
- John Steinbeck -
Un libro duro, maravilloso y de los que se leen varias veces en la vida.
ResponderEliminarUn saludo.
¡¡¡¡ Pobre del rico ... que en su cabeza no tenga ...un solo SUEÑO ....!!!!
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